El tiempo del Pachacutik
Entrevista con René Dávila, realizador.
por Solange Behoteguy
Un año después de la elección del primer presidente indígena, Bajo los Volcanes del realizador chileno René Dávila narra la historia de un período revolucionario extraordinario y pone sobre la mesa de discusión lo que está
en juego en Bolivia, pero también en América Latina, que como nunca se inclina hacia la izquierda, haciendo pensar que el otro mundo posible vendrá del Sur.
- Tu film es sobre todo un viaje por la Bolivia en revolución, las primeras imágenes son de Santa Cruz, donde actualmente se concentra la oposición, la burguesía económica del país que reclama la autonomía y que no soporta ser gobernados por un indio…
- René Dávila : Santa Cruz fue un descubrimiento para mí: el mundo amazónico, conflictos y fuertes dinámicas sociales. Yo creo que la ciudad de hoy no tierne nada que ver con aquella de los años 80. Las fuerzas conservadoras viven de un capital que ya nos
les pertenece. La burguesía cruceña no tiene el poder que tuvo. El peligro de desintegración del país es exagerado por ciertos medios simplificadores. El MAS (Movimiento Al Socialismo, el partido de Evo Morales) tiene una presencia importante que los medios niegan. Una gran
cantidad de inmigrantes del Occidente del país apoyan al actual gobierno, pero en la televisión sólo se ven las banderas autonomistas.
- Un año despues de la elección de Evo Morales y lo que se llamó la "Revolución por las urnas", ¿Tu crees verdaderamente que su gobierno es sólido, a pesar de los conflictos recientes?
- R.D. La política en Bolivia, aun cuando hay muertos, masacres, es todo menos un desorden, un caos. Es un período en que las fuerzas que se oponen no lo hacen ciegamente. Cada día la política es más fina, yo creo que los últimos momentos de barbarie absoluta
fue en Octubre del 2003, con Gonzalo Sánchez de Losada en la presidencia, quien terminó por enviar su renuncia por mail desde Santa Cruz antes de huir a Estados Unidos. Hoy las masas están con Evo , y Evo tiene el cuero duro, es un verdadero "animal político" El resto son enormes
operaciones de comunicación. Siempre es impresionante ver una multitud poseida por una pasión política, y en Bolivia siempre hay una razón para que la gente salga a la calle.
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La gente que protesta contra Evo con las banderas autonomistas no son una propiedad de la burguesía, no es una adhesión ciega, no irán a matar indios. Al lado de ellos hay grupos extremistas y exaltados, pero no son numerosos.
- Evo Morales habla del tiempo del Pachakutik ¿Qué significa?
R.D. La civilización aymará concibe el tiempo en grandes ciclos de 500 años. El cambio de un ciclo a otro está anunciado por acontecimientos y el paso de uno a otro es el Pachakutik, es el retorno al equilibrio, no solamente entre el hombre y la mujer, sino igualmente entre
el ser humano y el medio ambiente. Según la tradición el ultimo ciclo empezó hace 500 años con el asesinato de Atahualpa, el último soberano indígena antes de Evo Morales. La revolución boliviana no durará 4 o 5 años, ¡sino 500!
- ¿Eso implica la construcción de un otro mundo desde el Sur?
R.D. América latina vivió durante los 70 un ciclo de dictaduras conservadoras, en las condiciones de la posterior democratización y la imposición del Consesus de Washington y el modelo neoliberal, los objetivos se ampliaron, sin solucionar ninguno de los problemas de las
mayorías.
Durante los años 90 surgen los zapatistas, los Sin Tierra, los piqueteros, etc movimientos sociales que a través del continente cuestionan el modelo imperante… cada país es diferente, el modelo boliviano no se puede aplicar en Ecuador, y así sucesivamente. En Bolivia
la respuesta a la crisis del modelo es el MAS, como proyecto post-neoliberal, en Venezuela es Chávez, en Ecuador, Correa… Brasil, Lula
- Desde tu punto de vista, ¿Michelle Bachelet es la respuesta chilena?
El caso chileno es complejo. En Bolivia existe un proyecto revolucionario de re-fundación de la sociedad sobre bases completamente diferentes: solidaridad, reciprocidad y uso colectivo de los recursos naturales. Es un proyecto de fondo, de transformación, de participación. En
Chile reina un capitalismo absoluto. Bachelet gestiona el orden económico existente. Los grandes ejes de la sociedad chilena están allí, no han sido puestos en cuestión.
París, Enero 2007 |